Escritos

GIGLIO El habitar la ciudad del graffitero

Bebidas y envases: experiencia para la enseñanza de la apariencia del color. María Paula Giglio (español)


Beverages and containers: An experiment for color appearance teaching. María Paula Giglio



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Muestra: Juguete de artista / OBJuguETOS
Idea y coordinación del proyecto: Pablo Javier Hansen
Mar del Plata, Marzo de 2008
JUGANDO CON LAS PALABRAS
Autora: María Paula Giglio

Puede variar según las distintas culturas, sociedades, geografías y épocas históricas, según temáticas, género y edades, pero toda la humanidad de algún modo ha jugado y utilizado objetos para jugar aunque no hayan sido construidos para tal fin.

Objeto juguete – Juguete objeto
Uno de los errores más comunes es considerar el juego como si fuese un objeto. Pero el juego es la acción, en tanto que el juguete es el objeto o elemento que se utiliza para el desarrollo de dicha acción.
El juguete, como tal lleva implícita la idea de juego; es decir, si no hay posibilidad de juego, el juguete deja de ser-juguete. Por otro lado, el juguete necesita de un jugador para poder ser-juguete y lo que los vincula es la posibilidad del juego.
Tanto el juego (acción) como el juguete (objeto) se manifiestan a partir de la existencia del jugador (sujeto). Podríamos decir que un juguete comienza a ser-juguete cuando alguien juega con el mismo; y el usar un juguete con otro propósito distinto que el de jugar, hace que ese juguete deje de ser-juguete para pasar a ser otra cosa, mientras que el jugar es lo que permite que cualquier objeto se pueda convertir en un ser-juguete.
(…) El límite del juguete es la imaginación.

Juguete del diseño – Diseño del juguete
Existen una gran cantidad de juguetes en el mercado que resultan excelentes propuestas pero no todos se realizan como tales, sea por el alto grado de sofisticación, por el realismo que restringen la posibilidad de imaginación, porque se convierten en un fin en sí mismo y no en un punto de partida, o porque son pocos versátiles y no permiten la apropiación por parte del dueño.
(…) En síntesis, existen criterios para elegir juguetes y normativas para proyectarlos y construirlos. Le podemos pedir al juguete que cumpla con todos los requerimientos pero lo que no debemos olvidar es que sirva para JUGAR ya que el juguete que no permita jugar al sujeto deja de ser un juguete.

Arte de juguete – Juguete de Arte
Pero existe otro motivo por el cual un juguete deja de ser-juguete. Es que lamentable a medida que crecemos y nos hacemos adultos vamos dejando de lado la posibilidad del juego pero es tal vez el arte quien nos permite volver a encontrarnos con dicha capacidad.
Lo que es común a todos los juguetes es la posibilitad de suscitar el juego, y lo que es común al juguete y al arte es la posibilidad de suscitar la creatividad física y mental. Hablamos de ingenio, inventiva, originalidad, capacidad intelectiva e imaginación.
Dijimos también que cualquier objeto se puede convertir en un juguete para el jugador. Está en sus manos o mejor dicho en su capacidad creativa. Pero ¿qué debe tener un juguete para que sea un objeto del arte? En este caso debe cumplir una doble función en donde el espectador deje de tener una actitud pasiva para pasar a ser parte de una relación activa y variable a través del juego que suscita la obra. Es en el hecho estético donde existe la idea de juego.

Arte del juego – Juego del Arte
Sin hablar de juguete y sí del juego del arte, Hans-Georg Gadamer, en su libro La actualidad de lo bello (Paidós. Barcelona, 1998. pp 66-83), da una visión de mucha riqueza y profundidad desde la hermenéutica. Busca superar las diferencias entre un arte del pasado y un arte contemporáneo y encontrar la conexión entre ambos para definir la unicidad de la función artística, y para ello explica la experiencia del arte desde una base antropológica, a través de conceptos como «juego», «símbolo» y «fiesta».
Introduce el concepto de juego en el arte “precisamente para mostrar que, en un juego, todos son cojugadores” y “jugar exige siempre un «jugar-con»”. En el juego del arte “no hay ninguna separación de principio entre la propia confirmación de la obra de arte y el que la experimenta”.
Para Gadamer “la identidad de la obra no está garantizada por una determinación clásica o formalista cualquiera, sino que se hace efectiva por el modo en que nos hacemos cargo de la construcción de la obra misma como tarea”. Es un juego que implica movimiento de vaivén, “automovimiento que no tiende a un final o una meta, sino al movimiento en cuanto movimiento”, en donde la razón humana “ordena y disciplina, por así decirlo, sus propios movimientos de juego”. Ordena “el poder darse fines y poder burlar lo característico de la razón conforme a fines”. Se pone reglas a sí misma “en la forma de un hacer que no está sujeto a fines”. El juego es un juego libre entre entendimiento e imaginación.

Artista de juguete – Juguete de artista
El artista juega sabiendo que jugar puede significar seguir reglas, pero también permitir romperlas, sortearlas, contraponerlas o desafiarlas.
Simplicidad, multiplicidad, alusión a la realidad, reducción a lo esencial, trasgresión y provocación son algunas de las palabras que surgen bajo la idea del juguete de artista.

Mar del Plata, marzo de 2008